Según una nueva revisión, el déficit de micronutrientes podría estar relacionado con el autismo y otros trastornos del desarrollo neurológico.
El trastorno del espectro autista (TEA) ha estado en auge a nivel mundial durante décadas, un patrón que podría explicarse por una mayor conciencia, mejores métodos de detección, una definición más amplia y/o un aumento real de la incidencia.
Aunque se hayan investigado los factores de riesgo genéticos y ambientales de forma extensa, los factores de riesgo potencialmente modificables como el síndrome metabólico y la insuficiencia de ácido fólico y vitamina D no se han estudiado en detalle.
Los estudios recientes han presentado hipótesis sobre el mecanismo detrás de la relación entre el autismo y las deficiencias de vitamina D y ácido fólico, debido a la creciente frecuencia del autismo que coincide con un marcado aumento de la insuficiencia de folato materno.
Además, más estudios han señalado que la insuficiencia de vitamina D en el útero o en las primeras etapas de vida puede ser un factor de riesgo.
Nutrientes para el desarrollo neurológico
En base a esto, un investigador de la Universidad Nacional An-Najah de Palestina condujo una revisión analítica de la literatura que relacionaba las deficiencias de micronutrientes con trastornos del desarrollo neurológico para determinar si los niveles nutricionales bajos de las madres y niños palestinos eran un factor de riesgo para este tipo de trastornos.
Utilizó el más reciente Cuestionario de Micronutrientes de Palestina como referencia para los niveles nutricionales de la población: dicho informe había mostrado una prevalencia de anemia severa debido a la deficiencia de ácido fólico, hierro, zinc y vitamina B12, siendo un tercio de las mujeres palestinas embarazadas las que padecían esta afección.
Además, se descubrió que el 87,1% de las madres lactantes de la Franja de Gaza y 78,2% de Cisjordania tenían deficiencia de zinc. En lo que respecta a los niños entre 6 meses y 5 años, una cuarta parte de los niños y una quinta parte de las niñas eran anémicos.

Se observaron estadísticas similares en referencia a las deficiencias de vitaminas A, D y E, así como del ácido fólico.
Esto se observó a pesar de que el Ministerio de Salud de Palestina incluyera la nutrición en los programas de salud primaria y salud pública.
A las mujeres se les administran comprimidos prenatales y postnatales de ácido fólico, así como de hierro tres meses después de la concepción y tres meses después de dar a luz. A los recién nacidos se les proporcionan gotas de vitaminas A y D hasta que cumplen un año.
Desde el 2006, Palestina también ha tenido un programa de nutrición pública en forma de fortificacion de la harina, que implica la adición de 10 micronutrientes a la harina: ácido fólico, hierro, niacina, zinc y vitaminas A, B1, B2, B6, B12 y D.
Un enigma desconcertante
Según los estudios revisados, los niveles de micronutrientes maternos antes y durante el embarazo, así como durante la lactancia, son esenciales para un desarrollo neurológico saludable en los hijos. Los primeros dos años de vida son particularmente importantes ya que la capacidad de los niños para crear un sistema nervioso e inmune saludable se establece durante este periodo.
Por ello, es posible que una dieta pobre afectara tanto a las madres como a los niños evaluados, ya que el estudio también informaba de que la dieta tenía un rol prominente en la manifestación de la anemia y el déficit de vitaminas D y E.
Al igual que la ingesta de vitaminas para la memoria en cantidades suficientes se ha demostrado indispensable, es muy probable que en el autismo y otros trastornos del desarrollo neurológico se confirme igualmente su utilidad.
Los investigadores concluyeron: “Todavía no está claro si las intervenciones nutricionales y, en particular, los suplementos de micronutrientes (para madres o bebés) podrían reducir el riesgo de padecer trastornos del desarrollo neurológico mediante la mejora del desarrollo temprano del sistema inmunológico”.
“Se necesitan estudios adicionales para aclarar esta relación que podría contribuir en una mejor comprensión de los mecanismos preventivos”.
Referencias
Altamimi M. Could Autism Be Associated With Nutritional Status in the Palestinian population? The Outcomes of the Palestinian Micronutrient Survey. Nutr Metab Insights. 2018 May 10;11:1178638818773078.